Porque sì, duermo, pero tambien leo. Se ve que hoy me permití vacaciones por un ratito.
Inspirada en Wanda, y despues de haber sacado cálculos de cuantos años tardaria en ganar la plata para comprar todos los libros que queria el lunes, me fui a hacer socia a una biblioteca. Claro, la diferencia entre Boston y Montevideo es que para conseguir a Murakami o Zadie Smith acá tenés que pagar una cuota mensual.
Pero los libros para los niños y estudiantes son gratis, así que me fui con Mati y volvimos con cinco entre los dos. Barriga llena, que le dicen.
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Conozco alguien por allá que tiene una librería muy linda =) Se llama "La Lupa", claro que son menos democráticos que los de una biblioteca, no?
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